Traducción: Mariana Solana Texto original: http://www.feministcurrent.com/2013/12/08/10-myths-about-prostitution-trafficking-and-the-nordic-model/ 8 de diciembre de 2013 porMEAGAN TYLER 490125 Cuando la Coalición contra la Trata de Mujeres en Australia (CATWA por sus siglas en inglés) anunció el lanzamiento de un nuevo informe sobre el Modelo Nórdico, los defensores de la industria del sexo empezaron a atacar su página de Facebook. Cuando respondí con un artículo de opinión en The Conversation sobre los logros del Modelo Nórdico, un puñado de hombres y una prominente feminista australiana pasaron horas discutiendo los errores del enfoque nórdico como política sobre prostitución y menospreciando a cualquiera que se atreviera a pensar que una floreciente industria dedicada a la venta de los cuerpos de las mujeres es cualquier cosa pero inevitable. Estas falsedades y constructos sonarán conocidas a cualquiera que haya escrito o dicho algo públicamente en contra de la “industria del sexo”. Las mismas frases, muchas veces sin referencia a pruebas contundentes, se repiten tan frecuentemente en ciertas esferas que prácticamente se han convertido en una especie de mantra. Si lo dices con suficiente frecuencia, se convierte en verdad, ¿cierto? Con el ánimo de poder ofrecer respuestas de más de 140 caracteres a estas críticas, he aquí una lista de respuestas a los mitos que me han lanzado con mayor regularidad: 1. Soy una trabajadora sexual, elijo el trabajo sexual y me encanta. Esta es una de las más comunes respuestas del día y es considerada por quienes la utilizan como una especie de jaque mate, como si el hecho de que una persona exprese que disfruta del trabajo sexual hiciera desaparecer mágicamente las demás pruebas sobre la violencia, trastornos por estrés pos traumáticos y trata que ocurre dentro de la prostitución. Maud Olivier, la parlamentaria socialista que recientemente presentó el proyecto de ley para prohibir la compra de servicios sexuales en Francia, expuso contundentemente la "hipocresía" de estas críticas: "Así que es suficiente con que una prostituta diga que es libre para que la esclavitud de otras sea respetable y aceptable?"le preguntó a sus colegas parlamentarios. Pero la frase "Me encanta el trabajo sexual" se plantea como un argumento contundente porque se entiende que contrarresta la supuesta aseveración general por parte de feministas radicales y otros de que los sistemas de la prostitución son dañinos para las mujeres. Esto tiene que ver con una mala comprensión de las políticas radicales, el concepto de opresión estructural y los viejos debates sobre falsa conciencia. Solo porque te guste algo no significa que no pueda ser dañino (solo porque te guste algo no lo hace automáticamente feminista.) Las feministas radicales también critican las prácticas de belleza, a las que consideran dañinas, y que tú digas que te gusta usar tacones no invalida esta crítica. Tampoco significa que las feministas te odien por usar tacones (he oído esto en muchos tutoriales para estudiantes) o por estar en la prostitución. De la misma forma, cuando una persona que se identifica con la política radical señala que la elección libre es un cuento de hadas, y que todas nuestras acciones están limitadas por ciertas condiciones materiales, esto no significa que todos seamos pequeños e infantiles robots incapaces de tomar decisiones por sí mismos. Simplemente significa que no estamos todos flotando en un vacío cultural, tomando decisiones no afectadas por problemas estructurales como la desigualdad económica sistémica, el racismo y el sexismo. 2. Solamente las trabajadoras sexuales tienen la potestad de hablar sobre la prostitución Este mito a menudo va unido al primero. Y este es el mejor/peor ejemplo que me ha llegado. Si bien estos intercambios forman parte de un problema mayor en el que se intenta utilizar las experiencias personales para desmentir investigaciones y rebatir tendencias sociales más amplias (el sexismo no existe porque yo nunca lo he visto!), hay más de estas interacciones en el contexto de la prostitución. Decir que solamente las trabajadoras sexuales actuales tienen derecho a hablar de la industria del sexo es una forma de silenciar las voces de las sobrevivientes y pretender que las consecuencias de la prostitución solo se aplican sobre aquellas que están en la prostitución. Es verdad que mucha de la oposición feminista se ha enfocado en los daños de las mujeres en la prostitución, y con razón, pues estos daños son graves y endémicos. Pero, como señalan los defensores del modelo nórdico, la existencia de la prostitución constituyen también una barrera a la igualdad de género. Mientras las mujeres (y sí, hay hombres en la prostitución, pero por favor seamos honestos y admitamos que usar la palabra "personas" en este contexto solo oscurecería el hecho de que la mayoría de las personas en la prostitución son mujeres) puedan ser compradas y vendidas como mercancía es un problema para todas las mujeres. Los suecos reconocieron esto cuando introdujeron la prohibición de comprar sexo en 1999, y la ministra francesa de los derechos de las mujeres esta ocupada explicándolo otra vez en este momento. 3. Todas las “trabajadoras sexuales” están en contra del Modelo Nórdico En primer lugar, es importante señalar que por cada organización por los derechos de las “trabajadoras sexuales” en contra del Modelo Nórdico, hay una organización de sobrevivientes a favor. La idea de que toda mujer con experiencia en la industria del sexo detesta el Modelo Nórdico es una declaración estratégica defendida en todo el mundo por cierta cantidad de “organizaciones por los derechos de las trabajadoras sexuales” que se basa firmemente en el mito número dos. Esta aseveración es, muchas veces, acompañada de un enlace al blog de Petra Ostergren que prueba (eso nos dicen) que todas las mujeres en la prostitución odian el modelo nórdico y preferirían la legalización. Resulta claro que existe cierto número de ruidosos opositores al modelo nórdico dentro de la industria del sexo que gozan de una importante plataforma. Pero difícilmente podría decirse que estas organizaciones representan a todas las mujeres en la prostitución alrededor del mundo, o que una entrada en un blog (que es escueto en pruebas documentales o de otra índole) prueba que el modelo nórdico es un fracaso. 4. El modelo nórdico no respeta la autonomía de las mujeres. Una de las cosas que los críticos parece que encuentran dificil de entender es que el modelo nórdico se trata sobre restringir a los compradores, no a aquellas personas en la prostitución. Esta es la razón por la cual despenaliza a las personas prostituidas. El modelo no quita la posibilidad de la prostitución por "elección", sino que establece que la compra de mujeres dentro de un sistema prostituyente es algo que el Estado debería desincentivar activamente. En realidad es bastante simple. El modelo nórdico racionaliza que menos demanda de prostitución y menos demanda de tráfico se traduce en menos prostitución y menos tráfico∴ reduciendo así el número de mujeres expuestas a estos particulares tipos de abuso y creando una mejor oportunidad de alcanzar la igualdad de género. Si piensas que el Estado debería promover el crecimiento de la industria de la prostitución y tratarla como una forma de trabajo remunerado para las mujeres, entonces seguramente estaremos en desacuerdo, pero eso no significa que el modelo no respete la autonomía de cualquiera. 5. El modelo nórdico mezcla la prostitución con la trata. Muchos defensores del modelo nórdico adoptan la concepción de trata propuesta por el Protocolo de las Naciones Unidas para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas, Especialmente Mujeres y Niños [http://www.ohchr.org/EN/ProfessionalInterest/Pages/ProtocolTraffickingInPersons.aspx] (Ver el artículo 3a) Esta es una concepción de la trata más elaborada que la simple definición de "personas que son trasladadas atravesando fronteras internacionales a punta de pistola", una versión muy extendida dentro de la prensa dominante. Tal vez este es el punto en el que comienza la confusión. Pero incluso al utilizar esta definición más realista de los mecanismos de la coacción y la trata, el modelo nórdico no asume que todas las mujeres en la prostitución hayan sido necesariamente víctimas de trata. Lo que sí hace el modelo nórdico es reconocer que existe una conexión entre el mercado de la prostitución y la trata de personas con fines de prostitución, específicamente en el hecho de que la demanda de servicios sexuales alimenta la trata. Así que si quieres que haya menos trata, entonces deberías reducir el mercado de la prostitución. Este razonamiento fue respaldado por un reciente estudio llevado a cabo en 150 países, dirigido por economistas en el Reino Unido y Alemania, donde se demostró que "el efecto escala de la legalización de la prostitución conlleva a una expansión del mercado de la prostitución, incrementando la trata de personas". 6. El modelo nórdico no funciona/ empuja la prostitución a la clandestinidad. La opinión de que el modelo nórdico no ha reducido la demanda de la prostitución es con frecuencia repetida sin pruebas, pero ocasionalmente se dice que el propio informe del gobierno de Suecia ha demostrado el fracaso del modelo. Como lo ha demostrado el académico Max Waltman, el informe nunca supuso tal cosa. La investigación encargada por el gobierno sueco para revisión oficial demostró que la prostitución en las calles se había reducido a la mitad. “¡Ja!” Dicen los críticos: "Este estudio utilizó una metodología incorrecta y la prostitución solo ha pasado a la clandestinidad." Tal vez, pero eso también pasa por alto otras fuentes, entre las que se encuentra una investigación que indica que el número de personas en Suecia que compran sexo ha disminuido y que la policía informa haber interceptado comunicaciones de traficantes donde decían que Suecia era un "mal mercado". Es también importante notar qué significa la "clandestinidad" en este contexto, ya que en algunos sistemas donde se ha legalizado o despenalizado la prostitución, como en Australia, "clandestinidad" significa prostitución en las calles. Entonces, si la prostitución se ha retirado de las calles, ¿a dónde se ha ido? A Internet y dentro de las casas es lo que dicen los críticos, lo que es bastante raro por parte de los defensores de la legalización que con frecuencia pregonan sobre los beneficios de la prostitución a puerta cerrada. 7. El modelo nórdico les niega una forma de vida a las mujeres Este mito es el más curioso porque admite de hecho que el modelo nórdico funciona, contradiciendo directamente el mito número seis. El modelo solo puede negar a las mujeres una forma de vida si, de hecho, reduce la demanda de la prostitución. Además, los programas de salida son parte esencial del modelo e incluyen formación y apoyo laboral. Hashtags del tipo #nadasobrenosotrossinnosotros (utilizado por varios grupos, no solo organizaciones dentro de la industria del sexo) con regularidad aparecen junto con este mito, como si la única opción satisfactoria disponible para todos es aceptar un mercado floreciente de la prostitución solo porque algunos quieren que así sea. No cualquier persona, claro. Son los trabajadores, si crees en eso de que "el trabajo sexual es trabajo". Dejando de lado los problemas asociados a la idea de que la prostitución es un trabajo como cualquier otro, si aceptamos esta premisa, entonces el argumento no tiene sentido, ya que los trabajadores de una determinada industria no son quienes determinan si dicha industria continuará existiendo o no. Tomen por ejemplo el caso de la industria del carbón y deforestación en Australia. Estos son sectores que los gobiernos han considerado dañinos por diferentes razones y, como resultado (y aunque aún sean potencialmente lucrativos) ya no tienen el permiso social de continuar operando sin reparos. Los trabajadores de estas industrias con frecuencia se enojan al ver que sus trabajos están amenazados y es por ello que los sindicatos piden "transiciones justas", que les ofrezcan capacitaciones y facilidades a la hora de obtener servicios sociales y laborales a aquellas personas afectadas (¿suena conocido?). La mayoría de las veces, estos sindicatos han dejado de argumentar que estas industrias dañinas deberían seguir operando simplemente para evitar cambios en la vida laboral de los trabajadores. Si el trabajo sexual es trabajo, y la prostitución es como cualquier otra industria, entonces existe la posibilidad de que se abra al debate y a cambios de políticas públicas, como en cualquier otra industria, e incluso podría concebirse la posibilidad de que los gobiernos ya no quisieran que esta industria funcionara. 8. El modelo nórdico ha provocado inseguridad en la prostitución. Primero lo primero: la prostitución es insegura. Sugerir que es el modelo nórdico lo que la hace peligrosa no es sincero. Estas declaraciones también ignoran las investigaciones que muestras que las formas tradicionales de legalización y despenalización no hacen prácticamente nada a la hora de proteger a las mujeres en la prostitución contra los altos riesgos de violencia sexual y física, así como contra los traumas psicológicos. Los sistemas de legalización promueven una mayor demanda y crean una industria ilegal creciente a su alrededor, por lo que es una falacia pensar que en todos los lugares donde la prostitución es legal, todas las mujeres trabajan de hecho dentro de los márgenes legales de la prostitución. Además, los índices de traumas son similares tanto en en los sistemas legalizados y despenalizados como en los penalizados. Tristemente, ni siquiera el modelo nórdico es capaz de proteger de estas condiciones a las mujeres que aún se encuentran en la prostitución: mientras haya prostitución habrá daño, pero la idea de que el modelo hace empeorar las condiciones es falsa. Quienes dicen que hay "más violencia" con frecuencia se refieren al citado Estudio ProSentret, en el que se descubrió que las mujeres en la prostitución habían reportado un incremento en ciertas formas de actos violentos por parte de los prostituyentes, por ejemplo tirones de cabello y mordidas, tras la introducción del modelo nórdico en Noruega. Lo que se suele dejar de lado cuando se cita esto es que el estudio también halló que las mujeres habían reportado una fuerte disminución en otros tipos de violencia, por ejemplo golpizas y violaciones. Con referencia a las mujeres en prostitución que no pueden acceder a servicios sociales adecuados, este es un problema válido. De existir, debería ser tratado. Este es un problema de complementación más que un problema del modelo en sí mismo. La versión original del modelo nórdico que se introdujo en Suecia fue parte de la reforma Kvinnofrid cuyo objetivo fue destinar más fondos públicos y apoyo a una variedad de servicios que enfrentaban casos de violencia contra las mujeres, dentro de los cuales se incluyó específicamente la prostitución. Hemos visto esto otra vez en Francia, con leyes que despenalizan a las personas en la prostitución conjuntamente con medidas destinadas a disminuir otras formas de violencia contra las mujeres. 9. El modelo nórdico es en realidad una cruzada moral disfrazada. A pesar de que las políticas basadas en pruebas que propone el modelo nórdico han sido introducidas por gobiernos socialistas y progresistas, persiste la noción de que se trata de algún tipo de intento religioso o conservador oculto que quiere coartar la libertad de expresión, en lugar de ser una forma efectiva de enfrentar la trata y la violencia contra las mujeres. Pero tal vez todo esto depende de lo que cada uno defina como "cruzada moral". Si alguien piensa que el movimiento por la igualdad de las mujeres es una "cruzada moral", entonces supongo que tienen razón. Si alguien está decidido a desestimar todas las pruebas que apoyan el modelo nórdico, en su lugar quieren debatir esto a nivel "moral", entonces por favor háganlo. Aquellos que piensen que la violencia contra las mujeres es algo malo seguramente ganarán el debate. 10. Los académicos que investigan la prostitución hacen dinero a través de las mujeres en la prostitución. Este es un ítem relativamente nuevo en la lista de técnicas para silenciar que se utiliza en contra de aquellas mujeres que desafían la industria del sexo. La primera vez que me encontré con esta acusación fue en la sección de comentarios de esta página y luego en los correos de respuesta, donde muy amablemente me advertían que yo era igual que los hombres que violaban a las mujeres en prostitución porque estaba usando las experiencias de las trabajadoras sexuales sin haberles pagado. Así que voy a ser clara: los académicos realizan investigaciones. Para muchos, dentro de los que me incluyo, esto con frecuencia significa combinar investigaciones ya realizadas y, utilizando esas pruebas, crear un argumento defendible. Es nuestro trabajo. Y ese es nuestro trabajo sin importar el tema o área que nos encontremos investigando. Involucrarse en debates públicos sobre el modelo nórdico y presentar investigaciones relevantes al caso no es un intento de hablar por las mujeres en la prostitución. Es un intento de mostrar a más personas los hallazgos de esas investigaciones. Si esto se percibe como una amenaza dentro de la industria del sexo, entonces esto seguramente demuestra que el modelo nórdico es efectivo. Meagan Tyler es profesora de sociología en la Universidad de Victoria, Australia. Sus intereses en investigación académica se basan principalmente en la construcción social del género y la sexualidad. Sus trabajos en esta área han sido publicados en el Foro Internacional de Estudios de la Mujer y en la Revista Académica "Women and Therapy" (las mujeres y la terapia), así como en muchas otras colecciones editadas, entre las que se encuentra "Everyday Pornography" (Pornografía de todos los días) (Boyle ed., 2010) y "Prostitution, Harm and Gender Inequality" (Prostitución, daño y desigualdad de género" (Coy ed., 2012). El primer libro de Meagan, titulado "Selling Sex Short: The pornographic and sexological construction of women's sexuality in the West" (Quitándole importancia al sexo: la construcción pornográfica y sexológica de la sexualidad de las mujeres en Occidente), fue publicado en Julio de 2011. TAGS: FEMINISM, MEAGAN TYLER, PROSTITUTION, SEX WORK, THE NORDIC MODEL Visita nuestro canal de Youtube con interesantes videos traducidos y subtitulados en español: https://www.youtube.com/channel/UCuDKy2DjYr3Egw6iX1h1tcQ/videos
9 Comentarios
mariano
24/7/2016 05:49:36 am
Muy original la página!
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Jose Antonio
24/11/2016 11:42:14 am
Bueno no se si tienes interes en otras opiniones pero aqui van https://elestantedelaciti.wordpress.com/2016/04/10/la-falacia-paternalista-del-modelo-nordico-de-prostitucion/ https://elestantedelaciti.wordpress.com/2016/11/03/el-abolicionismo-es-el-patriarcado-de-nuestros-tiempos/
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Evelyn
16/6/2017 04:46:45 am
Mira tú... un hombre defendiendo la prostitución.. ¡quoén lo diría!
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Rodri
20/2/2019 02:21:04 am
Hay colectivos de mujeres que lo hacen, si careces de informacion mejor no opines
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Nima
9/1/2018 06:34:34 am
Excelente artículo! Si ni con esos argumentos tan verídicos y certeros aún hay gente que no quiere aceptar la realidad, hay que ver que tienen un serio problema de reconocimiento de qué es violencia a las mujeres y el sistema patriarcal en el que vivimos. No hay peor ciego que el que no quiere ver..
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Antonio
27/10/2019 05:27:42 pm
Sistema patriarcal,anda conspiranoica,¿es que vives en el libano?vivimos en uno de los países más seguros para la mujer,en España y esto no lo digo yo lo dicen investigaciones serias
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Ana
12/3/2018 09:29:24 am
Me parece ingenuo apoyar el nórdico y sólo analizar la bajada de prostitución.
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Antonio
27/10/2019 05:29:10 pm
Mira tu,aún hay esperanza,te recomiendo votar al P-LIB
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Nicolás
27/3/2018 11:24:52 pm
¡Muy bien explicado! Son grosísimas.
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